Decir lo que sentimos, sentir lo que decimos, concordar las palabras con la mente. (Séneca)

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miércoles, 15 de agosto de 2012

(Paréntesis) y sigo

Confieso: hace muuuucho que no hago los deberes. Me refiero a esta especie de diario que me saqué de la manga. Lo tenía un poquito abandonado, tengo que admitirlo. Mi única excusa posible, si es que hay alguna, es que el calor del veranito me descentró. Con eso de "vente a la piscina", "vamos a tomarnos unas cañitas", o incluso los días que pasé a remojo en el mar (¡cómo lo echaba de menos, por Dios!), pues me relajé en exceso. Mea culpa.

Quizás haya otra razón de fondo, no os voy a mentir. Como para explicarme bien tendría que contarlo todo todo, y ahora mismo no sabría ni por dónde empezar, resumo (Lo bueno, si breve, ... Ya sabéis) Pues eso, que básicamente se trata de lo de siempre: chica conoce a chico, chico enamora a chica, chica se monta su castillito en el aire, el castillo se derrumba. Plof. (No se me ocurre otra onomatopeya) Chica está depre, y pierde la inspiración. 

En todo este tiempo (¿cuánto he estado sin escribir?, ¿mes y pico?), las ganas de darle a la tecla no me han llegado. Aunque supongo que también es bueno desconectar, o al menos, hacer un intento. El caso es que lo dejé a un lado, como sin darme cuenta, y no hubo ninguna razón para volver. Pero he de reconocer que tampoco la busqué. Y hay que hacerlo. Hay mil historias sobre las que hablar (bueno, escribir), están ahí, entre nosotros, como los aliens (jeje), y sólo hay que saber mirar. 

Y vuelvo a intentarlo. Después de esta etapa de sequía, sin más ocupación que sentarme en una terracita a tomar el sol, hacer crucigramas (por cierto, soy malísima...) y darme un chapuzón en el mar o en la piscina, donde se tercie, retomo mi diario, con la intención de seguir contando cosas. Y no hay ninguna razón amatoria de por medio (¿amatoria he dicho? Me parece que me lo acabo de inventar, jaja) Chica y chico no volvieron juntos, el desamor sigue presente, y no hubo final feliz (de momento...), no como en tantas y tantas comedias románticas nos han intentado vender. 

No, razones amatorias no hay. Pero una persona me ha hecho muy feliz, porque resulta que hay gente que lee estas reflexiones absurdas que hago, y que encima las recomienda. Ayer cuando lo vi no me lo podía creer. Se me saltaban las lágrimas de alegría. Por eso, Pilar, muchas gracias, no sabes cuánto significó para mí que me incluyeras en esa lista de 7. A mí, que sólo llevo 8 míseras entradas en esto que se llama blog de casualidad, que pierdo la inspiración y me vengo abajo por problemillas tan insignificantes como una ruptura sentimental, cuando hay tantísima gente en el mundo con problemas de los de verdad. 

Pues eso, que no sé qué más puedo decir. Simplemente, que te dedico mi vuelta, con toda la humildad del mundo. Gracias por darme una razón para buscar historias que contar.

1 comentario:

  1. Hoy por ti y mañana por mí, ¿te parece? Cuando me veas ausente vienes y me das un merecido tirón de orejas.

    ¿Crees que es el chico el que enamora a la chica? Yo creo que la chica siempre, siempre se enamora, porque además nos empuja algún gen dominante ¡no nuestro! Sino del mundo que no quiere extinguirse ni ser un lugar gris.

    Un beso,

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