Decir lo que sentimos, sentir lo que decimos, concordar las palabras con la mente. (Séneca)

Decir lo que sentimos, sentir lo que decimos, concordar las palabras con la mente. (Séneca)

lunes, 31 de diciembre de 2012

Dos temas de los que (no) quería hablar...

Yo, que presumo de espíritu libre, de ir a mi bola, como dicen los modernos, de pasar de topicazos y buscar siempre lo original, me había prohibido a mí misma hablar aquí de dos cosas. Una, el supuesto fin del mundo. Con lo jugosito que es el tema. Podría haber contado algo sobre los mayas, o el señor Nostradamus, o que el Papa ya había anunciado que de final nada, y ya sabéis que lo que diga el Papa va a misa (chistaco). O podría haber contado que mis alumnos se pasaron el día 21 diciendo que íbamos a morir todos, que ya venían el meteorito, la ola gigante y los marcianos, que de tanto decirlo a mí ya me estaban dando ganas de que el martirio de escucharles terminara pronto, por Dios. Pero no lo conté. La otra cosa de la que me había prohibido hablar era la Navidad. ¿Qué contar de ella que no hubiera sido dicho ya? Era tan difícil encontrar algo nuevo, que me dije que pa'qué aburrir a nadie. Pero me he decidido a llevarme la contraria a mí misma. Lo sé, James Dean lo aprendió todo de mí...

viernes, 21 de diciembre de 2012

Medio ángel, medio demonio

Soy una persona afortunada. Así lo digo, con rotundidad, que en estas cosas no dudo. De salud, gracias a Dios, muy bien. Familia, siempre a mi lado. Amigos, los justos, pero de los buenos. Amor, depende del momento; se puede decir que sigo buscando, como mucha otra gente. Y encima trabajo en lo que adoro. Ya se lo vaticinó a mi madre el médico que me vio venir al mundo: "Su hija será una persona afortunada" Esto tan bonito lo dijo porque nací en martes y trece, y supongo que fue para quitarle hierro a la dichosa superstición. Pero me gusta pensar que tuvo alguna razón más profunda para decirlo, un pálpito. Yo soy así de espiritual, qué le voy a hacer. Ahora, no os vayáis a pensar que vivo permanentemente en Los mundos de Yupi, que tan repipi y súper happy no soy. Como todo hijo de vecino, hay días en los que salgo del trabajo más cabreada que una mona. La semana pasada, sin ir más lejos.

sábado, 15 de diciembre de 2012

No digas (muchas) palabrostias...

Había una vez una niña muy estudiosa que aprobaba todos sus exámenes y que se portaba muy bien. Era dulce y muy maja, la verdad, y siempre ponía una sonrisa a todo. Y tenía muy buenos modales, por supuesto. Hola, buenos días, gracias, por favor, y cuando había que protestar, como mucho soltaba jopé. Un amor, vamos. Un poco repollo, si me apuras. Pero un día se dio cuenta de que el repollo se había ido. Había salido la bestia que llevaba dentro. Bueno, qué leches, que el mundo la había hecho así. No hace falta que diga a qué niña me refiero, ¿no?...

domingo, 9 de diciembre de 2012

Frío y Kevin Bacon

Este fin de semana pasado hizo un frío del carajo. Odio el frío, no sé si lo he dicho alguna vez. Se me hielan los pies. Me duelen las manos. Voy encogida de un lado a otro, envuelta en un abrigo que oculta todas mis femeninas curvas (jeje), y me lanzo al primer radiador que encuentro cuando llego a mi destino. Que digo yo que cómo lo harán los rusos para no morir en el intento. El otro día le comenté a mi familia, así, dejándolo caer, que, si alguna vez se les ocurre regalarme un viajecito a algún destino exótico (por pedir, que no quede...), que por favor no me manden a Rusia. O les retiro la palabra para siempre. Y punto. El frío me pone de una mala leche... 

domingo, 2 de diciembre de 2012

"Perdona,¿estudias o trabajas?" y otras historias de ligoteo (II)

Definitivamente, no soy la persona más indicada para dar consejos. Sobre nada. Así que prefiero que no me los pidan, que me ponen en un compromiso. Me cambia la cara, lo prometo. Se hace un silencio incómodo, y entonces empiezo con mis frases a medias: "Puessss...  No seeeeé... Estooooo... Yo creo que... En mi opinión... Pero, vamos, que no soy la más indicada..." Yo aviso, para que luego no me vengan con reclamaciones. Mis consejos nunca llevan garantía. Si quieres los comes, y si no, los dejas. Lentejas en estado puro.